En una rueda de prensa, el jefe de Gabinete argentino, Marcos Peña, anunció que promoverán una nueva normativa para sustituir tanto la polémica ley de medios, que generó toda una batalla legal entre el Gobierno de Cristina Fernández y el grupo Clarín, desde 2009, cuando fue aprobada, hasta 2013, cuando entró en vigor tras ser confirmada su constitucionalidad, como la ley de telecomunicaciones (2014).
Para discutir la creación de la nueva ley se creará una comisión bicameral del Congreso.
El jefe de ministros aseguró que las normativas actualmente vigentes ya eran «viejas» cuando se aprobaron porque estaban concebidas «en la visión de la comunicación del siglo XX».
«En el siglo XXI no se puede separar lo que son las comunicaciones de servicios audiovisuales, del cable, la telefonía, del celular, internet… ya que son todos parte de una misma lógica», defendió.
Respecto a la ley de medios, el jefe de Gabinete aseguró que solo fue un «arma» del kirchnerismo en su «guerra contra el periodismo», ya que «la mayoría de los objetivos de esa ley nunca fueron llevados adelante, tan solo aquellos que tenían que ver con los objetivos políticos».
«Hoy, por decisión del presidente Macri, termina la guerra del Estado contra el periodismo en la República Argentina y empieza el siglo XXI en lo que tiene que ver con las comunicaciones», recalcó, antes de adelantar que el gobierno reducirá también la inversión en pauta publicitaria y que buscará menos «injerencia» en los medios.
«Para el Estado no hay medios amigos o medios enemigos, sean poderosos o no», dijo Peña, en referencia al enfrentamiento que mantuvo el Ejecutivo de Cristina Fernández con algunos grandes medios del país, como el conglomerado multimedia Clarín, mayor grupo mediático del país, obligado a desconcentrarse por la ley de medios, que según el kirchnerismo buscaba evitar monopolios.
Además, anunció que hoy se firmará un decreto para crear el Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom), un nuevo organismo que absorberá la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (Afsca) y la Autoridad Federal de Tecnología de la Información y las Comunicaciones (Aftic), organismos creados por las leyes kirchneristas para regular medios y telecomunicaciones.
La semana pasada el Gobierno había anunciado la intervención de ambos organismos ante la negativa de sus titulares, nombrados por el Gobierno de Cristina Fernández, a dimitir tras la asunción de Macri.
El Enacom tendrá «representación parlamentaria, donde también estén los sectores de la oposición y que a diferencia de lo que ocurrió con el Afsca y el Aftic, nuestra idea es que esas voces sean parte de un equipo de trabajo», prosiguió Peña.
Por último, el jefe de Gabinete anticipó que «se van a sacar cepos a la industria» para fomentar las inversiones y que haya «un contexto de competencia».
También participaron en la rueda de prensa el ministro de Comunicaciones, Óscar Aguad, y Miguel de Godoy, futuro responsable de Enacom.