Dicho percance tuvo que ver con las pruebas del sistema automático, por lo que la empresa Metro de Quito le pidió a la constructora que de inmediato se reponga el tren en las mismas condiciones que lo recibió, a lo que esta respondió que los seguros se activarán y en el momento pertinente se entregará el tren. «Eso fue lo que sucedió durante el periodo previo a que inicien operaciones», sostuvo el Gerente.
Villacrés afirmó que, a través del consorcio CAF y del personal en talleres y cochera, se realiza un mantenimiento cada 45 y, además, previo a la operación diaria se hace un chequeo de las unidades. Por otro lado, resaltó que la actual administración del Metro de Quito ha «pecado» de ser «demasiado transparente», en cuanto a la entrega de información a la ciudadanía y diversos actores políticos.
Al momento, explicó el Gerente, se opera con 15 trenes en horas pico y con 10 en horas valle, como consta en el contrato, lo que permite una distancia entre trenes de 3 minutos en horas pico y 7 en horas valle. En cuanto a los tres restantes, uno está de respaldo, otro en mantenimiento por reperfilamiento de ruedas, y uno más a cargo de la aseguradora.
Además, Villacrés recordó que el 01 de diciembre de 2023 se activó el contrato con el consorcio CAF, porque existe dependencia tecnológica, ya que muchos de los elementos de los trenes son de esa marca. «Cuando les compramos los trenes en 2014, ellos en su oferta generaron un plan de mantenimiento y junto a eso presentaron una proforma que era vinculante para cuando inicie operación», acotó.
Adelantó que defenderán los intereses de la ciudad para que se respete el valor establecido en el contrato para efectuar el mantenimiento por cinco años, que pasó de USD 12 millones en 2014 a USD 35 millones en la proforma entregada durante este año.
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