El presidente de la AILE, Felipe Cordovez, calificó a la revisión del impuesto a los licores como un paso “muy positivo”, que permitirá regresar el cálculo de este impuesto a prácticas internacionales. Recalcó que desde enero de 2015 se implementó un doble cálculo en el país: uno al momento de desaduanizar y otro recálculo un mes después, mientras que en todos los países se calcula el Impuesto a los Consumos Especiales (ICE) en la aduana.
No obstante, Cordovez aseguró que no se verá una caída significativa de precios en los licores debido a que la estructura arancelaria y los niveles del ICE en Ecuador sigue siendo alta. Dijo que en el largo plazo bajarán un máximo del 6 %, aunque la firma del acuerdo con la UE sí representará una caída significativa de los precios.
De todos modos, indicó, esto se aplicará a los licores provenientes de Europa. Para ver una disminución en los licores de la región habrá que esperar al levantamiento de salvaguardias, aunque los costos en el país seguirán siendo un 20 % más altos que los países vecinos, sentenció.
Finalmente, el representante de los importadores de licores aseguró que, contrario a la intención del Gobierno de disminuir el consumo subiendo los precios, lo que ha habido es un fortalecimiento progresivo del contrabando, convirtiéndolo en un excelente negocio. Explicó que el mercado formal se ha contraído un 90 % pero el consumo no se ha reducido.
Esta revisión del ICE a los licores consta en las nuevas reformas tributarias que se tramitan en la Asamblea y son un pedido de la Unión Europea, puesto que antes de que se implementara el cálculo adicional de impuestos a estos productos, se había acordado no hacerlo.