La Vicealcaldesa explicó que, parte de los retos que tiene la ciudad, es garantizar el abastecimiento de agua potable para toda la población, y para ello se ejecutan proyectos como el de la planta de Calderón, que dotará del líquido vital a la parroquia más grande del país y a otras, como Pomasqui y San Antonio de Pichincha.
Otro de los retos es preservar la biodiversidad en el Chocó Andino, al tiempo que se dinamice la economía local. Para ello, dijo Racines, se incentiva un turismo ecológico, que promueva las actividades en la naturaleza, al tiempo que se busca preservar los recursos de esta zona de la ciudad.
Racines agregó que la construcción de los senderos seguros también busca promover las actividades en los barrios, para que la ciudadanía se apropie del espacio público. Añadió que el Municipio de Quito busca ser «como una madre», para que exista igualdad de condiciones en todos los barrios de la ciudad. Esto quedó evidenciado con la entrega de 2.500 títulos de propiedad en distintos sectores de la capital.
Reconoció que las parroquias rurales estuvieron descuidadas durante administraciones anteriores, pero destacó que durante la actual Alcaldía se ha desarrollado una estrategia de desarrollo rural, para que las necesidades particulares de cada parroquia se canalicen y sean solventadas en un trabajo conjunto de las autoridades con la ciudadanía.