Sánchez señaló que, una vez que se suspendieron los racionamientos de agua potable para los sectores que se abastecen de la planta de Puengasí y con una reducción del consumo registrada en las últimas semanas, existen «mejores condiciones» para proveer el servicio a los barrios de la capital.
Recordó que apenas el 5,6% de la población se vio afectado durante los cortes de agua, pero al momento no existen complicaciones para dotar del líquido vital a la ciudad. Al momento, el servicio está garantizado para el 98% de los barrios de la capital, dijo Sánchez, y añadió que en el 2% restante se encuentran barrios no regularizados, aquellos que están en cotas altas, entre otros.
En este sentido, explicó que se están implementando nuevos proyectos para la mejora del abastecimiento, pues las complicaciones «no surgen por falta de caudal, sino de proyectos». Uno de ellos es el el Proyecto de Agua Potable para Calderón, que tiene una inversión de USD 130 millones y solucionará el problema de escasez en la parroquia más grande del país.
Precisó, además, que las medidas de racionamiento que se aplicaron durante el verano fueron preventivas, para no poner al límite el sistema y arriesgar el abastecimiento para 650.000 personas, que son las que se abastecen de la planta de Puengasí. Añadió que los informes con estos detalles y otros de importancia se remitieron al Ministerio de Ambiente y a otros entes que han solicitado información.
En cuanto a la adquisición de generadores móviles para su instalación en las estaciones de bombeo, Sánchez detalló que se hizo una inversión de USD 2.5 millones por 4 equipos, los cuales están listos para ser utilizados. Al momento existe un proceso adicional para la compra de nuevos generadores para cubrir la demanda, especialmente para los barrios que se encuentran en zonas altas de la ciudad.
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