El presidente Guillermo Lasso suscribió el pasado 30 de noviembre el Decreto Ejecutivo 611, que incrementa el Salario Básico Unificado en USD 25, ascendiendo a los USD 450. Este monto, que regirá desde el 2023, se oficializó debido a una falta de acuerdo entre empleadores y trabajadores, para establecer el salario para el próximo año.
Gómez aclara que, pese a que el gobierno cumple con su promesa de campaña de incrementar USD 100 en los cuatro años de mandato, existen reformas laborales pendientes que garanticen un mejor ámbito de contratación. Señaló que el 65% de ecuatorianos, dentro de la población económicamente activa, no tienen un empleo, y por ende un salario adecuado.
El Primer Mandatario aseguró que las empresas “están vendiendo más que nunca” y que este éxito debería compartirse con los trabajadores. Ante esto, Gómez aclara que el crecimiento se ha ralentizado en el segundo semestre del 2022.
“Comenzamos a ver señales de contracción. El sector formal se ve expuesto a incrementar los salarios, cuando por otro lado, su producción se ve abocada a reducir sus ingresos”, mencionó.
Según el especialista, para garantizar un alza efectiva en los salarios, se debía haber trabajado en la reforma laboral para generar empleo, facilidades a los empleadores para procesos de contratación y medición de la productividad laboral.
🔊En #NotimundoEstelar, @rgdelat, representante de los empleadores en el Consejo Nacional de Trabajo y Salarios, señaló que el aumento de USD 25 al #SBU, beneficia únicamente al 15% de la población con empleo.
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— NotiMundo (@notimundoec) December 2, 2022
Mencionó que el incremento de USD 25, beneficia únicamente al 15% de la población con empleo, y que además de este valor, se requieren mayores recursos para sobre sueldos y fondos de reserva. Señaló que esto representa entre un 30 y 40% adicional anual, por cada empleado.
Por último, recalca que es necesaria una política clara respecto a las variaciones salariales, y que esto no se rige en ámbitos sectoriales, sino de cada negocio.
“Habrá empresas que tengan mayor productividad. Tenemos que analizar el tema salarial en función de la productividad laboral y no solamente en función de decisiones políticas”, señaló.
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