En el año 2005 se inauguró el túnel Guayasamín. Una gran obra de movilidad que permitía a los quiteños trasladarse en pocos minutos desde Quito hacia los valles y viceversa. Desde su apertura, esta infraestructura no permitió el flujo del transporte público, enfocándose así sólo en vehículos particulares. La nueva Solución Vial Guayasamín permitirá el ingreso del transporte público, lo que reducirá tiempos de desplazamiento y nuevas rutas de servicio.

Actualmente alrededor de 34 mil vehículos transitan por el túnel Guayasamín. Si un vehículo moviliza en promedio a dos personas, 68 mil personas se trasladan por esta ruta. La Solución Vial Guayasamín se proyecta como un nuevo acceso para el transporte público. Esta obra descongestionará los ingresos que son utilizados por los buses intraparroquiales, como la estación Rio Coca y el Trébol, que actualmente están saturados por la alta demanda.

En una entrevista con los medios de comunicación, el Alcalde Mauricio Rodas hizo un llamado a la ciudadanía para que se informe de los beneficios de esta obra, que no sólo solucionará el cuello de botella que se genera en esta zona, sino también aportará con la creación de nuevas rutas para el sistema de transporte público. “Me llama la atención sobre el cuestionamiento que ciertos sectores hacen a la Solución Guayasamín. Basta analizar el presupuesto municipal que se destina para mejorar el transporte público, alrededor del 70% del presupuesto general”, señaló el Alcalde.

“Que sucede con un ciudadano que vive en el Quinche y quiere llegar a la Marín, tiene que viajar al terminal Rio Coca en el extremo norte para luego regresarse al sur. Es una pérdida de tiempo porque hoy los buses no pueden entrar al túnel Guayasamín. Con esta solución los buses si podrán entrar directamente por este sitio” indicó.

Esta mega obra tendrá dos puentes. Uno de ellos el más grande de la ciudad, una estructura de 500 metros de longitud y pilas de 120 metros altura. Por esta vía de tres carriles, que también será peatonal, la ciudadanía podrá acceder al transporte público, conectándose directamente a la Ecovía o a las rutas que actualmente existen en esa zona.

“El debate debe tener criterio y sustento técnico, debe ser serio y no politiquero. Hasta el momento no hay una sola propuesta, que sea concreta, de quienes se oponen a la Solución Guayasamín. Nosotros fuimos elegidos para tomar decisiones en beneficio del interés común y colectivo en beneficio del mejoramiento de la calidad de vida de los quiteños. Vamos a cambiar a Quito, transformarla y proyectarla a la modernidad”, concluyo el Burgomaestre.