Manzano consideró que la postura de Vinazin fue la mejor salida a un conflicto que iba a escalando de a poco, no obstante, insistió que los Ministerios del Gobierno, en este caso el del Ambiente, evidencia la desconexión con la población y distintas organizaciones sin fines de lucro.
«Lo más importante que tiene el Ecuador es toda esta ebullición de organizaciones que están tomando ciertas responsabilidades que le tocan a los Ministerios y que dan lugar a que no estén desatendidos ciertos lugares», apuntó.
Manzano sostuvo que es importante que el Gobierno evalúe el momento que atraviesa el país y la región, respecto de la protección ambiental y los principios de desarrollo sostenible, donde el acceso a la información, la participación ciudadana y la justicia ambiental juegan un papel fundamental.
Asimismo, insistió en que el Ejecutivo debe dar respuestas concretas y oportunas, además de tener de su lado el recurso de la mediación para estos casos.
La jurista destacó que gracias a este caso, se puso nuevamente sobre la palestra la importancia de la fragilidad de los ecosistemas y de la importancia de preservar el medio ambiente. «Este es un tema de que si tienes una actividad productiva, debe existir una licencia ambiental; este es un aprendizaje», acotó.
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