El terremoto de magnitud 8,4 en la escala de Richter que en septiembre de 2015 estremeció el norte y el centro del Chile y dejó 15 muertos, 6.056 damnificados y 971 casas destruidas ha generado, hasta el momento, 2.674 réplicas de más de 3 grados, según un informe publicado hoy.

El documento publicado por el Centro Sismológico Nacional de la Universidad de Chile destaca que el terremoto de septiembre causó el desplazamiento de más de siete metros entre las placas del Nazca y Sudamericana frente a las costas del sector ubicado entre el municipio de Los Vilos y Punta Lengua de Vaca, donde se registró el epicentro de la sacudida de tierra.

Es en dicha zona donde se han registrado la mayoría de los sismos que han ocurrido durante los últimos seis meses y que se pueden considerar, según el texto, como «parte del proceso de re-acomodación de tensiones en la región», denominadas como réplicas.

La última de las réplicas, de magnitud 5,6 en la escala de Richter, se produjo la madrugada de este miércoles sin ocasionar víctimas o daños de consideración, según informaron las autoridades.

El movimiento telúrico ocurrió a las 00.49 hora local (03.49 GMT) y su epicentro se localizó en el mar, a 43 kilómetros al oeste de la localidad de Canela Baja y a 264 al nornoroeste de Santiago, a una profundidad de 30,5 kilómetros, informó el Centro Sismológico Nacional, de la Universidad de Chile.

«Se espera que el número de réplicas vaya disminuyendo con el transcurso del tiempo, tal como ha acontecido en los últimos meses», señaló el informe, que destacó que durante los diez días posteriores al terremoto de magnitud 8,4 se registró una intensa actividad sísmica en ese lugar.

No obstante, el documento afirma que «es esperable que ocurran réplicas de mayor tamaño -sensibles por la población- las que a su vez traerán consigo réplicas propias de menor tamaño».

«Es muy poco probable que ocurra un sismo de las mismas características en el mismo lugar donde este ha ocurrido ya que se requieren de varias décadas para acumular la energía equivalente en desplazamiento a la liberada durante este terremoto», agregó.

El informe también señala que las regiones «inmediatamente al norte y al sur de la zona de ruptura de 2015» son las que tienen más posibilidades de sufrir otro terremoto, pues «son los lugares donde no han ocurrido terremotos durante el último tiempo».