Reino Unido congelará los contactos de alto nivel con Moscú, anunció May en Londres.
Además, expulsará a 23 diplomáticos rusos del país. Tienen una semana para irse.
«Para aquellos que buscan hacernos daño, mi mensaje es simple. No son bienvenidos aquí», dijo May.
May dijo a los parlamentarios que Rusia ha demostrado un «completo desdén por la gravedad de estos eventos» y no ha brindado «ninguna explicación creíble» sobre por qué se utilizó un agente neurotóxico de grado militar para envenenar al exagente ruso, Sergei Skripal y su hija, Yulia.
«No han proporcionado ninguna explicación creíble que pueda sugerir que perdieron el control de su agente neurotóxico», añadió.
No hay explicación sobre cómo este agente llegó a usarse en el Reino Unido; no hay explicación de por qué Rusia tiene un programa de armas químicas no declarado en contravención al derecho internacional.
«En su lugar, han tratado el uso de un agente neurotóxico de grado militar en Europa con sarcasmo, desprecio y desafío», dijo.
Expulsar a los diplomáticos fue solo una de una serie de medidas que la primer ministra propuso el miércoles. También dijo que propondrá nuevos poderes legislativos para fortalecer las defensas de Gran Bretaña y atacar los activos rusos.
«También haremos pleno uso de los poderes existentes para mejorar nuestros esfuerzos por monitorear y rastrear las intenciones de aquellos que viajan al Reino Unido que podrían estar involucrados en actividades que amenazan la seguridad del Reino Unido y de nuestros aliados», explicó.