Desde las 07:45 de este lunes, cientos de personas se congregaron en el Cuartel General de la Policía Metropolitana, ubicado en Loma de Puengasí (sur de Quito), para continuar con los siguientes pasos en el reclutamiento de 240 nuevos gendarmes.

El Telégrafo

En los exteriores del establecimiento se instalaron carpas y sillas para que los aspirantes esperen en cómodas condiciones hasta que llegue su turno y presenten los documentos para pasar al siguiente nivel de selección. La primera llamada fue el 5 de marzo. En la página web se registraron más de 24 mil aspirantes, detalló Juan Zapata, secretario de Seguridad del Municipio de Quito, quien llegó al lugar para platicar con los aspirantes.

Del número de seleccionados, 72 cupos serán para mujeres y 168 para hombres. De ese grupo, 14.389 postulantes pasaron al siguiente nivel, que consiste en acudir al cuartel para registrar su estatura y verificar los datos en las hojas de vida. Cada postulante se demoró alrededor de 45 minutos en este proceso.

Los convocados llegaron no solo de distintos puntos de Quito, sino también de varias provincias del país, especialmente de Santo Domingo de los Tsáchilas e Imbabura. El secretario añadió que se creó una Comisión de Acompañamiento, conformado por representantes del Colegio de Abogados de Pichincha, de Quito Honesto y otro de 18 Colectivos ciudadanos. Esta comitiva hará el seguimiento a todo el proceso.

Tendrán acceso a cualquier base de datos e incluso a las pruebas para garantizar que el aspirante se esforzó y es merecedor del cupo. Además será para evitar que haya extorsión de los ciudadanos. Zapata informó que hasta el viernes 16 de marzo se receptarán las carpetas. La siguiente fase será entre el 23 y 25 de marzo cuando se publique el listado para las evaluaciones académicas, luego siguen las académicas y después las psicométricas.

Los seleccionados seguirán un curso de seis meses en la Escuela de Formación de Agentes Metropolitanos. Ellos ocuparán labores en las áreas de Turismo, Ambiente, Vinculación Comunitaria, Espacio público y Gestión de Riesgos.

Fuente: El Telégrafo