Nueve personas fueron asesinadas durante un ataque armado en el Puerto Pesquero de Esmeraldas, la mañana del 11 de abril. El crimen fue perpetrado por 30 hombres que arribaron al lugar por vía terrestre y marítima. En Notimundo al Día, Julio Vásquez, jefe de Policía de la Subzona Esmeraldas, informó que de las 144 muertes que se registran en 2023, solo 4 son por delincuencia común.

Foto: Archivo / Policía

En Notimundo al Día, Julio Vásquez, jefe de Policía de la Subzona Esmeraldas, ofreció más detalles sobre la masacre ocurrida la mañana del martes 11 de abril en el puerto pesquero de la provincia. Reconoció que la situación es «compleja» debido a los altos índices de criminalidad y violencia que se registran, debido a la presencia de grupos de delincuencia organizada que buscan ganar territorio, sobre todo en las zonas rurales.

Vásquez explicó que las muertes violentas en Esmeraldas se ubican en 144 en lo que va de 2023, y «buscan generar temor» en las bandas rivales, pues asegura que la mayoría de fallecidos están vinculados de forma directa o indirecta con el crimen organizado.

Para ello, sostuvo, la Policía continúa haciéndole frente al negocio del narcotráfico, que es la economía que mueve a estas estructuras, logrando la incautación de más de 3 toneladas de droga en los primeros 4 meses del año. Agregó que otra de las actividades a las que se dedican las bandas que operan en la provincia es la extorsión, conocida popularmente como ‘vacunas’.

Respecto del ataque armado en el puerto pesquero, que dejó un saldo de 9 personas asesinadas, aseguró que ya se tiene identificados a los presuntos responsables y anunció que continuarán los allanamientos para su captura. Así mismo, indicó que el móvil del atentado habría sido la negativa de los comerciantes del puerto a pagar el monto que solicitaban los ‘vacunadores’ para otorgarles seguridad.

Vásquez negó que la policía haya visto rebasada su capacidad, y, por el contrario, afirmó que la institución «está fortalecida», con 2.000 uniformados en la provincia, la cual se encuentra en estado de excepción desde el pasado mes de marzo.

Para el jefe policial, la falencia ha sido la falta de denuncias por parte de los afectados. «Tenemos un equipo más que suficiente de investigación en la provincia, lo que necesitamos es información», apuntó.

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