El nuevo proceso de evaluación de los policías asignados a las provincias fronterizas con Colombia, anunciado por el régimen, se realizará desde junio próximo. Los 1.909 policías que laboran en la provincia de Esmeraldas serán los primeros sometidos a prueba para luego seguir con los 764 de Carchi y 741 de Sucumbíos.

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Entre las filas policiales hay preocupación. El anuncio se suma a la orden de incrementar los operativos en la zona, según sostienen policías entrevistados por El Universo bajo reserva de la fuente.

Los ataques, desde enero pasado, con coche bomba en el cantón San Lorenzo, en Esmeraldas, secuestro y asesinato de un equipo periodístico de El Comercio en la misma provincia, más el cautiverio de una pareja han marcado un cambio en el trabajo policial.

Un uniformado que laboró en San Lorenzo en los últimos tres años cuestiona que solo se someta a estas pruebas, que incluyen el uso del polígrafo a los miembros de la tropa, dejando a un lado a los oficiales y a los ministros.

Concuerda con él otro uniformado que opera en Esmeraldas. Su temor, dice, no es infundado. En su caso, no pasó la prueba del polígrafo realizada en esa provincia en el 2015, pero no fue desvinculado, ya que el proceso incluyó las otras tres aristas: la psicológica, toxicológica (en la que se analiza si el cuerpo registra consumo de drogas) y la socioeconómica (en la que se verifica que no exista un incremento injustificado de los bienes del policía y su familia), de las que habría salido bien librado, comenta.

Lenin Bolaños, inspector general de la Policía, asegura que la evaluación integral de con fianza, incluido el análisis socioeconómico, permite realizar un seguimiento no solo a los policías, sino hasta los generales.

Ahora el potencial de hallar alguna actividad ilícita ya no depende del área policial de la que se es parte, indican los uniformados. “Hasta hace unos cinco años estar controlando el tránsito o la migración era tranquilo. Ahora allí también te topas con los ilícitos”, afirma uno del área de tránsito, quien ha hecho guardia en la vía que une la capital provincial, Esmeraldas, con San Lorenzo.