Solicitar asilo o refugio. Esas son las alternativas que tienen los asambleístas del correísmo que desde hace más de una semana permanecen en la Embajada de México en Quito. El coordinador del bloque de la Revolución Ciudadana, Juan Cristóbal Lloret, manifestó que sus coidearios Gabriela Rivadeneira, Soledad Buendía y Carlos Viteri Gualinga todavía están “evaluando”.
La normativa mexicana agrega que, si bien no existe un procedimiento universal para la concesión del asilo, se trata de una facultad discrecional del Estado. Precisa que este debe fundamentarse en razón de “delitos políticos o delitos comunes con fines políticos”.
El embajador Alejandro Suárez, director de la Academia Diplomática, analizó que la embajada de México no podría ceder asilo político en los casos de delitos comunes; sin embargo, el principal requisito para que los asambleístas puedan solicitarlo es presentarse como personas bajo persecución política.
#AlejandroSuárez: “Esos actos que se le atribuyen dan pie a una formulación de cargos. Dicho esto, un pedido de asilo procedería. Pero insisto, mientras no haya fundamentos, el #Gobierno mexicano no tendría porque conceder un asilo”. #NotiMundoAlDía
— NotiMundo (@notimundoec) October 24, 2019
Enfatizó en que es complicado para las embajadas, en general, recibir a personas. «Son siete personas que requieren las condiciones adecuadas para estar en ese espacio. Habrán tenido que hacer adecuaciones«, precisó Suárez.