En Decisiones con Jorge Ortiz, Santiago Guarderas, Rafael Oyarte y Bernardo Abad analizaron la crisis que atraviesa el Municipio de Quito. Los panelistas coincidieron en que la capital atraviesa una falta de gobernabilidad, carencia de proyecto como ciudad y un deterioro permanente.

Decisiones- Fm Mundo

Santiago Guarderas aseguró que si asume nuevamente la Alcaldía de Quito pondrá la “casa en orden” y calificó como caótica la situación municipal, pero afirmó que en los 20 meses que sobran de gestión podrá poner orden al interior del cabildo.

Guarderas presentó una acción extraordinaria de protección que aún está en trámite en la Corte Constitucional y que al criterio del abogado constitucionalista Rafael Oyarte podría demorar en dar una resolución. Oyarte señaló que lo que sucede en Quito no solo evidencia una crisis política sino también una crisis en el sistema judicial.

Por su parte, el concejal de Quito Bernardo Abad confirmó que Quito sí está al borde del abismo y seguirá mientras Jorge Yunda siga al frente del Municipio. A su criterio, no hay visión ni proyecto de ciudad. Abad recordó los casos de corrupción investigados en contra de Sebastián Yunda y aseguró que él y su familia han lucrado de la ciudad. “El removido solo está de barrio en barrio y si continuamos hasta ahora Quito entrará en un caos institucional” agregó.

Sobre los escándalos de corrupción también se refirió Santiago Guarderas y comentó que antes y después de las elecciones no conocían que el hijo de Jorge Yunda tenía una administración paralela. Después de las investigaciones se descubrieron temas como la compra de las pruebas PCR y la vinculación con la empresa Geinco. “Son temas que jamás nos hubiésemos imaginado con una administración de la familia Yunda”, acotó.

Guarderas afirmó que, en materia política, la fuerza que removió a Yunda sigue sólida, mientras que se ha visto que las agrupaciones que lo acompañan han perdido fuerza. Guarderas aspira en su regreso al Cabildo capitalino y ofrece trabajar con transparencia. “Lo primero que haré el primer día es firmar un Código de Ética en la que todos los funcionarios municipales deberán cumplir para evitar, precisamente, todo lo que hemos vivido” señaló.

Para Abad, el proceso de remoción de Yunda no fue jurídico sino de control político. De llegar Guarderas a la Alcaldía, dijo Abad, lo apoyaremos, aunque, señaló, que habría que analizar los factores políticos con ciertas influencias externas. “Hay algunos concejales que están ahí, “culipandeando” para saber por dónde van y por quién es el mejor postor” agregó.

Los 3 panelistas concluyeron en que Quito vive una crisis no solo en lo político sino una crisis de identidad que podría repetirse si en las próximas elecciones no se vota con coherencia. Guarderas afirmó, finalmente, que no hay liderazgo por parte de ciertas autoridades que parecerían improvisadas, dijo. Abad ratificó que Jorge Yunda es un obstáculo para la ciudad y proyectos importantes como el Metro de Quito. El edil pidió que el Gobierno Central intervenga en el Metro de Quito, porque teme que sea una obra estancada y sin avance.

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