El caso de Melannie Abril se suma a las recientes denuncias presentadas por aspirantes de formación de la Policía Nacional, que evidencia la crisis de la formación institucional del organismo. La cadete indicó que el 3 de abril recibió un castigo de su brigadier, en las instalaciones de la Escuela Superior de Policía, al encontrar una prenda íntima en el baño, presuntamente de Pérez. La instructora ordenó a la aspirante a tomarse un baño de agua fría y a permanecer con un biki mojado toda la noche, lo que provocó que Abril perdiera la consciencia, y amaneciera con otra ropa. La cadete informó que tras exámenes médicos le diagnosticaron ansiedad y un hematoma en la cabeza.
#MelannieAbril: «Muchas veces el abuso de mando de la autoridad, dentro de la institución, como hay que respetar la jerarquía, uno cumple órdenes que nos dan. Muchas veces terminan en abuso».
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— NotiMundo (@notimundoec) October 19, 2022
A pesar de la vulneración de derechos que habría sufrido Melannie Abril en la escuela policial, la cadete confirmó su deseo de continuar su instrucción. El abogado de Abril, Ángel Portilla, señaló que se presentó la denuncia al Departamento Jurídico de la Policía por “tortura y tratos crueles, inhumanos y degradantes”, y resaltó que, el 9 de mayo el director Nacional de Educación de la institución dispuso la reincorporación de la alumna, sin embargo, hasta el momento, ha presentado “más de seis escritos y el debido proceso”, pero no se ha procedido a la reintegración de la aspirante.
Abril aseguró que no existió ninguna sanción para la brigadier que la agredió, a pesar de que este caso “fue de conocimiento general en la Escuela”, y la instructora continuaría ejerciendo sus labores. La cadete destacó la necesidad de que en la institución se emprenda una capacitación formativa en valores, ética y defensa de derechos humanos, para evitar este tipo de violaciones, incluso dentro del organismo.
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