La Comisión de Desarrollo Económico no encuentra consenso en cuanto al monto que se incluirá para la contribución que deberán realizaran los trabajadores y servidores públicos y privados para enfrentar la emergencia sanitaria derivada por el coronavirus.

La Comisión espera cerrar este jueves el debate respecto al articulado del proyecto urgente de Apoyo Humanitario para entrar el viernes a la redacción y aprobación de lo que será el informe final. Crédito: captura de pantalla.

La Comisión de Desarrollo Económico no encuentra consenso en cuanto al monto que se incluirá para la contribución que deberán realizaran los trabajadores y servidores públicos y privados para enfrentar la emergencia sanitaria derivada por el coronavirus.

Este tema constituye el más polémico en la comisión, pues las fuerzas políticas como el PSC, RC y SUMA, se cierran a cualquier posibilidad de establecer una tabla para que los trabajadores aporten un porcentaje de sus salarios para alimentar a la cuenta única por la emergencia que estaría dirigida a financiar planes, programas, proyectos y actividades de salud y sustento de personas en estado de vulnerabilidad, incluyendo transferencias monetarias; proyectos para sostener el empleo y para reactivación productiva.

El presidente de la Comisión, Esteban Albornoz (AP), presentó a los legisladores una tabla que proyecta el número de personas que aportaran respecto al rubro salarial y además señala el monto total de la recaudación.

Si la base de aportación será sobre el sueldo de USD 720 mensuales, el número de personas que deberán aportar serán 886 004 y se recaudaría USD 882 873 224; si se calcula para quienes perciben USD 1 000 mensuales se afectaría a 554 128 trabajadores y se recaudaría USD 851.802.599.

En cambio, si la tabla de aportes empieza de un salario de USD 1500 mensuales tendrán que aportar 300 208 trabajadores y se recaudaría USD 726.051.278; y si la contribución empieza para quienes ganan $2500 al mes cubriría a 119.150 trabajadores y se recaudaría $547.084.609.

La propuesta inicial del Ejecutivo planteaba que la contribución empiece para aquellos trabajadores públicos y privados que perciban un sueldo mensual neto de USD 500.

Ante la falta de consensos sobre la tabla de contribución, el asambleísta Rubén Bustamante (AP), planteó que sea el pleno quien tome la decisión respecto a este tema y se proponga una tabla desde los USD 1 000.

Aclaró que no se está pidiendo todo el sueldo de un trabajador que el aporte podría ser de USD 6 mensuales, «que muchas veces se lo gasta en dos cervezas».

César Rohón (PSC), planteó un nuevo mecanismo frente a múltiples pedidos de los sectores productivos del país que piden el archivo del proyecto. Con tanto rechazo al proyecto ya constituye una rebelión, y hay que evitar el caos, acentuó Rohón.

Por esa razón, propuso que tanto las empresas y personas naturales firmen un pagaré al fideicomiso que manejará los fondos por el valor total de la contribución, ese documento se tranza en bolsa o a través del sistema financiero nacional o internacional.

«Entonces, el Estado recoge el dinero sin meterle la mano al bolsillo de la gente y a las empresas, dejando que éstas tengan ese oxigeno necesario y liquidez para sobrevivir y enfrentar la crisis», insistió el legislador socialcristiano que volvió a señalar «no voy a votar por más impuestos».

Doris Solis (RC), dijo que al colocar una tabla de USD 720 hasta USD 1.500 se afecta a la inmensa mayoría de trabajadores quienes en este momento luchan para ver cómo obtener alimentos y cubrir las pensiones escolares de sus hijos.

De ahí que insistió, vía resolución, incluir un texto sobre la contribución solidaria del 2% de las personas y sociedades que tienen sus bienes en paraísos fiscales, que deberá ir directamente al pleno.

La resolución de Soliz, se tomó al día siguiente que la comisión votó un texto respecto a eliminar ese mismo texto que se incluyó en el Art. 5 del proyecto para primer debate, porque según su proponente, Homero Castanier (CREO), empañó el primer debate y causó intranquilidad en los ciudadanos.

La moción presentada por la asambleísta Soliz, recibió el respaldo de siete votos: Fernando Burbano (BADI); Rubén Bustamante y Mariano Zambrano (AP); Fernando Callejas (CREO); Carmen Rivadeneira, Doris Soliz y Mauricio Zambrano (RC). Se abstuvieron: César Rohón (PSC); Guillermo Celi (SUMA); Homero Castanier (CREO).

Informe para segundo debate

La Comisión espera cerrar este jueves el debate respecto al articulado del proyecto urgente de Apoyo Humanitario para entrar el viernes a la redacción y aprobación de lo que será el informe final.

En tres días de discusiones la Comisión avanzó en temas que no fueron observados en el primer debate o que teniendo observaciones son menos conflictivos para llegar a consensos.

Se abordó los temas laborales como el teletrabajo, medidas para apoyar la sostenibilidad del empleo, medidas solidarias para el bienestar social y reactivación productivas, la reducción emergente de la jornada de trabajo, goce de vacaciones por devengadas y por adelantado, prestación del seguro de desempleo, estabilidad de los trabajadores y profesionales de la salud, así como las disposiciones transitorias.

Fuente: El Universo-Nota Original: LINK