El oftalmólogo Li Wenliang había trabajado en un hospital ubicado en el epicentro del brote, la ciudad de Wuhan, en el centro de China.

El Universo

El fallecimiento de Li Wenliang, un oftalmólogo que dio la alarma sobre la nueva cepa viral, ocurrió el mismo día en que el presidente Xi Jinping trató de dar garantías a su par estadounidense de que China hace todo lo posible por contener la epidemia que ha matado a unas 722 personas.

China está logrando resultados gradualmente y confía en que podrá derrotar la epidemia sin consecuencias económicas de largo plazo, dijo Xi el viernes al presidente Donald Trump en una conversación telefónica, de acuerdo a la televisión estatal.

La provincia de Hubei y su capital Wuhan, donde se inició el brote, están en cuarentena. China ha aislado ciudades, canceló vuelos y cerró fábricas, suspendiendo los suministros para las empresas multinacionales, de modo que Pekín parece ahora una ciudad fantasma con sus principales centros turísticos y lugares públicos virtualmente desiertos.

Acusado por alterar la paz

La muerte de Li, de 34 años, generó expresiones de congoja en las redes sociales. El médico estuvo entre las ocho personas que recibieron reprimendas de la policía en Wuhan -la capital de la provincia de Hubei donde se originó el virus- por propagar información «falsa e ilegal» en torno a los contagios.

El oftalmólogo Li Wenliang había trabajado en un hospital ubicado en el epicentro del brote, la ciudad de Wuhan, en el centro de China. Él fue uno de los que envió un mensaje el pasado 3 de diciembre en su cuenta de Weibo, una red social similar a Twitter, que decía que había visto una muestra que indicaba la presencia de un coronavirus similar al síndrome respiratorio agudo grave (SARS, por sus siglas en inglés).

El 30 de diciembre, Li le envió un mensaje a sus colegas en un chat, en el que les advirtió del brote y les recomendó usar ropa protectora para evitar contagiarse. China cerró el mercado de Wuhan donde se vendían especies animales el 31 de diciembre.

Las advertencias de Li en las redes sociales acerca de un coronavirus parecido al SARS -una referencia al Síndrome Respiratorio Agudo y Severo que causó la muerte de casi 800 personas en el mundo en 2002-2003 tras aparecer en China- provocó la ira de la policía. China había sido acusada de intentar encubrir los alcances de aquella enfermedad.

Li fue obligado a firmar una carta el 3 de enero diciendo que había «alterado gravemente el orden social» y fue amenazado con acusaciones penales.

Y una semana después de que recibiera la visita de la policía, Li tuvo que tratar a una mujer que sufría glaucoma. No sabía que ella había contraído coronavirus.

En el texto que publicó en Weibo, el médico describió cómo el 10 de enero empezó a toser, que al día siguiente tuvo fiebre, y dos días más tarde estaba en el hospital.

Sus padres también se enfermaron y fueron trasladados al hospital.

Fue 10 días más tarde, el 20 de enero, cuando China declaró la emergencia a raíz del brote.

Li contó que le hicieron pruebas varias veces para ver si se trataba de coronavirus, y que todas dieron negativo. El 30 de enero volvió a hablar del tema en las redes sociales. «Hoy me dieron el resultado de las pruebas de ácido nucléico y es positivo. Finalmente he sido diagnosticado«, publicó.

Temor y repudio

«Lamentamos profundamente la muerte en Wuhan del doctor Li Wenliang (…) después de todos los esfuerzos de rescate, Li falleció», dijo el Diario del Pueblo del Partido Comunista en Twitter.

Usuarios de la redes sociales describieron a Li como un héroe, acusando a las autoridades de incompetencia para abordar a tiempo los contagios.

«Wuhan de hecho debe a Li Wenliang una disculpa», dijo Hu Xijin, editor del tabloide Global Times, en redes sociales. «Las autoridades de Wuhan y Hubei también le deben una disculpa solemne al pueblo de Hubei y a este país», añadió.

Algunos medios describieron a Li como un héroe por «estar dispuesto a decir la verdad» pero había señales de que las discusiones sobre su muerte estaban siendo censuradas.

«El gobierno de Wuhan debe unas disculpas al doctor Li Wenliang» y «queremos libre expresión» se convirtieron en tendencias rápidamente, pero el viernes no había resultados para esas búsquedas en internet.

Fuente: El Universo – Nota Original: aquí