Al cumplirse 16 días de movilizaciones, la medida del diálogo para plantear soluciones, se ve afectada por los niveles de violencia suscitados durante las protestas del sector indígena. Por esta razón, y a causa del último ataque registrado en Sushufindi, el presidente Guillermo Lasso anunció que no se retomará el diálogo mientras se sigan manifestando agresiones.

Créditos: Fernando.L@gla (El Universo)

En NotiMundo Estelar, Diego Ordóñez, consejero presidencial, informó que el pronunciamiento del Presidente responde a las actitudes contradictorias del dirigente indígena, Leonidas Iza. El pasado jueves se entabló un diálogo con una delegación de 5 miembros de parte del sector indígena, y “se llegó a un acuerdo que topaba todos los puntos que exigen”, mencionó. Sin embargo, al día siguiente, Iza declaró, en el ágora de la Casa de Cultura, que hay intenciones de derrocar al Gobierno.

Ordóñez detalló que, a pesar de las insinuaciones golpistas de parte de Iza, se decidió retomar el diálogo el día lunes 27 de junio. En tanto, el ministro de Gobierno, Francisco Jiménez, asistió en representación del Presidente que “el señor Iza llegó atrasado a decir que no quería dialogar”, añadió. Informó que “mientras se realizaba el encuentro había actos de violencia en las calles”. De esta manera, era imposible que haya un diálogo porque “ese escenario no legitima un espacio constructivo y de paz para que el diálogo tenga sentido”, agregó.
El Consejero Presidencial, manifestó además que, basado en su accionar, no ha habido una intencionalidad de parte del Presidente de la Conaie para dialogar y llegar a acuerdos. “El señor Iza quiere un diálogo sin discusiones, quiere que haya una rendición a sus planteamientos y arbitrariedad”, añadió. Aunque el Gobierno ha cedido en la mayoría de los 10 puntos que exige la Conaie, esta organización continúa manifestando que están inconformes. “Es humillante para el Ecuador que estos dirigentes pretendan que el Estado se incline frente a ellos”, exaltó.
El Gobierno plantea que el diálogo se llevará a cabo cuando se cuente con la presencia de “legítimos representantes del Ecuador”. “La legitimidad no la adquiere un líder que está secundando actos de violencia, sino quien representa los verdaderos intereses de la organización por la que habla”, comentó Ordóñez. De esta manera, agregó que los problemas de salud, educación e infraestructuras que enfrentan las comunidades indígenas son evidentes, pero que la manera adecuada de atender esas necesidades se basa en “organizar una agenda” y que “eso es un diálogo, no una imposición con actos de violencia y chantaje”.
Ordóñez informó que “las medidas compensatorias adoptadas por el presidente Lasso no benefician a la Conaie, sino a millones de ecuatorianos”. Además, comentó que la mayoría de las resoluciones que se han planteado son el resultado de discusiones con otros sectores sociales que también comparten las necesidades del pueblo indígena. A pesar de esto, “Iza no es la contraparte con la que se puede llegar a un entendimiento”, agregó.

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