El Gobierno de EE.UU. anunció este jueves 26 de marzo que donará USD 210 millones a 64 de los países más afectados por la pandemia del coronavirus, lo que incluye a España e Italia, que suman entre los dos 121 996 casos de contagio y 10 939 fallecidos.
Además, USD 64 millones serán destinados al Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), anunció en un comunicado el secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo.
«En total, esos USD 274 millones de hoy proporcionarán recursos a 64 de los países del mundo en mayor riesgo para que puedan combatir mejor la pandemia y permitir a Acnur ayudar a algunas de las poblaciones más vulnerables del mundo», manifestó el titular de Exteriores.
Pompeo no especificó a qué países irá destinada la ayuda, pero se prevé que la lista incluya a España con 47 610 casos y 3 434 fallecidos; e Italia, donde 74 386 de sus habitantes están contagiados y 7 505 han muerto, de acuerdo a datos de a Organización Mundial de la Salud (OMS).
Por el contrario, seguramente los enemigos de EE.UU. más afectados por el virus no recibirán asistencia, como es el caso de Irán, que tiene 29 406 personas infectadas y 2 234 han muerto, y China con 81 961 casos y 3 293 fallecidos desde que comenzó allí la pandemia en diciembre.
El coronavirus ha abierto un nuevo campo de batalla entre Washington y Pekín, que se han sumergido en una carrera frenética para ver quién logra primero una vacuna, y compiten para demostrar su poderío mediante el envío de ayuda a diferentes naciones afectadas.
«Los fondos de hoy son fruto del liderazgo de décadas de EE.UU. en asistencia humanitaria y mundial«, subrayó en su comunicado Pompeo, uno de los miembros de la Administración que más crítico se ha mostrado con Pekín.
A nivel global, el número de casos de coronavirus asciende a 465 915 y hay 21 031 fallecidos, según los últimos datos de la OMS. Esa institución ha advertido de que EE.UU. se está convirtiendo en el foco central de la pandemia por la rapidez de los contagios que se están registrando en ese país a un ritmo casi tan rápido como en Europa.
Fuente: El Comercio-Nota Original: LINK