El cosejero presidencial, Santiago Cuesta, había asegurado que la Refinería de Esmeraldas debía ser cerrada por sus altos niveles de contaminación, o concesionada al sector privado para que implementaran la Norma Euro 5 (protocolo de tratamiento ambiental) en la planta.
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Para la prefecta de Esmeraldas, Roberta Zambrano, estas declaraciones habían «asustado» a los esmeraldeños, ya que el cierre de esta refinería significaría la pérdida de empleo para cientos de personas. «Se habla de cerrar la planta sin pensar en los más de 1 500 empleados, directos o indirectos, que trabajan para la Refinería«.
Sin embargo, la Prefecta aseguró que tras una audiencia con el ministro de Energía, Carlos Pérez, se confirmó que la Refinería de Esmeraldas no terminaría sus operaciones; sino que, más bien, se invertiría aún más para cumplir con las normativas de protección ambiental.
#RobertaZambrano: «Tenemos exigencias para el Gobierno. Nuestro temor del posible cierre es que muchas personas se queden sin empleo.» @PrefecturaESM #RefineríaEsmeraldas
— NotiMundo (@notimundoec) August 27, 2019
Además, Zambrano explicó que el Gobierno todavía no ha decidido si la inversión será realizada por el sector público o privado. «Si el Estado cuenta con los recursos, realizará el financiamiento para potenciar la Refinería y construir un planta de tratamiento de azufre. Lo importante aquí es resolver el temor que tenía de que se deje a los trabajadores desempleados«.
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