Las autoridades en Hawai han advertido de un peligroso fenómeno vinculado con la llegada a las aguas del océano Pacífico de la lava proveniente del volcán Kilauea, que entró en erupción el 3 de mayo.

Efe

Dos flujos de lava «llegaron al océano en la costa sureste de Puna durante la noche», en la Gran Isla de Hawai, dijo el servicio geológico estadounidense (USGS), que monitorea volcanes y sismos en todo el mundo, en un comunicado el domingo.

Una grieta en el suelo bajo uno de los canales de lava «desviando lava… a cavidades subterráneas», explicó el texto.

El encuentro de la lava incandescente con el agua produce humos ácidos, un fenómeno llamado en inglés «laze», una palabra formada a partir de los términos «lava» y «haze» (niebla).

«La nube de humo es una mezcla irritante de ácido clorhídrico (HCl), vapor y pequeñas partículas de vidrio volcánico», dijo el USGS.
Nubes blancas de ácido y cristales extremadamente finos se elevaban hacia el cielo de Hawai al contacto del magma del volcán Kilauea con el océano, creando un nuevo peligro en la erupción que comenzó hace dos semanas.
Las autoridades advirtieron el domingo a la población que se mantenga lejos de la nube tóxica producida por la reacción química cuando la lava toca agua de mar.

Tierra adentro, el magma continuó saliendo de las grandes grietas que se abrieron en el piso en vecindarios residenciales de una zona rural de la Gran Isla. La roca fundida formó ríos que dividieron bosques y granjas en su sinuoso avance hacia la costa.