Más de una de cada tres multinacionales estadounidenses siguen viendo los mercados en desarrollo de América del Sur como elemento central para sus planes de inversión y crecimiento corporativo, reveló hoy un estudio.

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El dato principal de la investigación realizada por el grupo de servicios holandés TMF es que, a pesar de que la inversión directa extranjera (IED) está en descenso en el mundo, el 36,4 % de las multinacionales estadounidenses planea invertir en los mercados emergentes de Suramérica durante los años 2017 y 2018.

El porcentaje es 2,8 puntos menor si se compara con el anterior sondeo realizado por TMF en asociación con Forbes Insights, que se refería a los planes de inversión para el periodo 2015-2016.

Pero, aun así, el español Raimundo Díaz, director regional de las Américas del grupo, consideró «alentador» el hecho de que «a pesar de las bajas mundiales en la inversión, las empresas estadounidenses todavía reconocen el potencial y la oportunidad que ofrecen los mercados clave de Sudamérica».

El estudio se basa en las opiniones de 250 ejecutivos «senior» basados en Estados Unidos y busca explorar las motivaciones y desafíos de las multinacionales para llevar a su organización a un nuevo mercado internacional.

Los encuestados fueron seleccionados de una amplia gama de industrias y organizaciones con ingresos anuales que van de 250 millones de dólares a más de 5.000 millones de dólares.

El interés de las multinacionales estadounidenses por invertir solo ha aumentado respecto del anterior sondeo en Europa del Este (+3,2 puntos) y Australia-Nueva Zelanda (+9,6 puntos).

Respecto de Suramérica, Díaz dijo que «el renovado interés en los metales básicos y otras materias primas ha sido un catalizador de crecimiento en países como Perú, Brasil y Chile, pero los fuertes avances tecnológicos y de manufactura en toda la región también han ayudado a mantener niveles de inversión».

Díaz indicó que ahora que en Estados Unidos se discute la necesidad de aumentar la inversión en infraestructura, «los activos relacionados con el cobre están aumentando» y Chile, primer productor de ese metal, y Perú, también con «extensas reservas de cobre y oro», cobran mayor interés.

Sobre Brasil, que es actualmente la novena economía más grande del mundo, señaló que «ofrece oportunidades de inversión en una amplia gama de sectores, incluyendo: minería, energía, bienes raíces y agronegocios».

De Colombia resaltó el programa de inversión de infraestructura a gran escala «Post-4G», que ofrece a los inversionistas «la oportunidad de involucrarse en proyectos significativos como aeropuertos y carreteras en los próximos 10 años».

El negocio de TMF, fundada en 1988 y con sede central en Amsterdam, es prestar servicios a las multinacionales que han decidido instalarse en un país determinado.