Carrillo explicó que en esa zona existe un represamiento de agua en la compresa que se ubica cerca de las torres del Teleférico, con cerca de 2.500 metros cúbicos de líquido natural que proviene de la fuente que hay en el sitio.
Al momento, en la parte baja ya se ha culminado con la limpieza de troncos y material que dieron paso al desbordamiento de la represa, y en el transcurso del día se hará una evacuación del agua represada en la parte alta.
Agregó que esto es importante, pues se requiere espacio para el líquido que debe ser liberado. «Esto significa que la obra de captación que tenemos abajo esté limpia y tenga la capacidad suficiente para contener el agua que baja», añadió.
Carrillo dijo que, en el caso de que exista un nuevo desborde, existe una franja de protección donde se ubica en la zona cero, donde también ha sido restringido el tránsito vehicular.
En la quebrada Rumipamba, en cambio, se ubica la represa más grande de la capital, que desde que se construyó en 1998 no se ha visto rebosada. Sin embargo, al momento se trabaja con los pronósticos del Inamhi para evitar un posible desbordamiento, por las intensas lluvias que se registran en la ciudad. «Aquí no hemos tenido dificultades», sostuvo.
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