«La incidencia o la transmisión del nuevo coronavirus constituye una amenaza grave e inminente para la salud pública», indicó el ministerio de Sanidad británico en un comunicado, en el que explica haber tomado medidas para «retrasar o impedir nuevas transmisiones del virus».
En el marco de las nuevas medidas, las personas infectadas con el coronavirus pueden ser ahora forzadas a hacer cuarentena y no podrán partir por su voluntad si constituyen una amenaza para la salud pública.
«Reforzamos nuestra reglamentación para que podamos mantener a los individuos aislados por su propia seguridad y si los profesionales de la salud pública consideran que se corre el riesgo de que propaguen el virus a otras personas», declaró un vocero del ministerio de Salud.
El gobierno anunció que el hospital de Arrowe Park en Merseyside (norte de Inglaterra) y el centro de Kents Hill Park en Milton Keynes (centro de Inglaterra) son los lugares destinados al «aislamiento».
Fuente: El Universo, nota original aquí: LINK