Cientos de personas se concentraron este lunes 28 de octubre frente al Palacio de los Tribunales de Justicia de Chile para exigir sanciones para los responsables de las muertes y torturas de agentes del Estado contra los detenidos en las protestas de los últimos días.

El presidente Piñera se ha mantenido neutral, aunque su gobierno apoyó el acuerdo político que posibilitó este plebiscito como salida a la grave crisis que estalló en octubre de 2019. Créditos: EFE

La movilización había sido convocada por asociaciones de familiares de desaparecidos, presos y ejecutados políticos de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), federaciones de estudiantes, sindicatos, asociaciones de defensa de los derechos humanos, organizaciones feministas y colectivos LGTBI.

Frente a la puerta de la sede del Poder Judicial de Chile, que estaba custodiada por una fila de carabineros, los manifestantes llegaron con siluetas de color verde y negro que simbolizaban a las 20 víctimas mortales que dejan los disturbios acontecidos a nivel nacional desde el pasado viernes 18.

Al menos cinco de esas víctimas perecieron por acciones de agentes del Estado, tanto militares como carabineros, según pudo constatar el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH).

La protesta también tiñó de rojo las fuentes que se encuentran en la Plaza de la Justicia como metáfora de la sangre que se ha derramado en las manifestaciones, pues hay registro de más de 1.000 heridos, de los que prácticamente la mitad son por armas de fuego.

A la convocatoria también se sumó Amnistía Internacional (AI), que desde este lunes tiene una misión en el país para observar y reunir evidencias de las posibles violaciones a los derechos humanos cometidas en el contexto del estado de emergencia que el presidente Sebastián Piñera decretó para desplegar militares en las calles.

La organización internacional desplegó una gran pancarta con la frase «Presidente Piñera, defensores de los derechos humanos vigilando».

Fuente: EFE – Aliado estratégico FmMundo