El Gobierno ecuatoriano ha detectado una grave crisis de seguridad y recursos dentro del sistema penitenciario, por lo que decretó, el pasado 16 de mayo, el estado de excepción. En este marco, el coronel Alberto Molina, militar en servicio pasivo y exconsejero nacional electoral, afirmó que este decreto no podría solucionar la crisis que vive este sistema, debido a que «el problema es estructural, porque hay corrupción y deficiencias en todos sus niveles«.
Además, el Coronel criticó que dentro de las cárceles de Ecuador, se atenta contra los derechos humanos; porque los internos viven en condiciones de hacinamiento y sin los recursos básicos. «Dentro de la cárcel de Latacunga, que se dijo que era la más moderna de Latinoamérica, ni siquiera tienen agua», expresó.
#AlbertoMolina: «Hay falta de alimentación y agua para los reos, hay que preparar y entrenar mejor a los guías penitenciarios.» #CárcelesEcuador #NotiMundoEstelar
— NotiMundo (@notimundoec) 22 de mayo de 2019
Otro de los problemas que se identificó en el sistema de rehabilitación social es la presencia de bandas de contrabando, que ingresan drogas, armas, celulares, entre otros, a las penitenciarias. De hecho, según Molina, es evidente que «existe complicidad» por parte de las autoridades de control, porque este negocio ilícito «mueve mucho dinero«.
#AlbertoMolina: «Fallan los sistemas de control; hay complicidad. Ejemplo de ello la ambulancia que entró con mujeres, además, una botella de alcohol allá vale USD 1000. » #CárcelesEcuador #NotiMundoEstelar pic.twitter.com/kdSWDPzSFJ
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