Durante el mes de julio se registraron fuertes lluvias que han causado complicaciones en varios sectores de la provincia de Pichincha. El hecho más reciente, se suscitó la tarde del pasado 31 de julio, donde cerca de 20 viviendas en Calderón, Pomasqui y Llano Grande se vieron afectadas. En Notimundo Estelar, Javier Macas, técnico de Pronósticos del Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi), informó que estas precipitaciones son producto de irregularidades climáticas causadas por fenómenos de efecto invernadero.

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Durante julio, y durante los dos primeros días de agosto, se registraron fuertes lluvias, pese a que estos “son los meses más secos en los que suele haber bajos niveles de precipitación”. Así lo indicó el técnico de Pronósticos del Inamhi, Javier Macas, y explicó que “el cambio climático está repercutiendo en que haya estos eventos extraordinarios”.  

Macas informó que este “choque climático” es producto de varios factores como los gases de efecto invernadero, el calentamiento global y un desbalance energético que derivan en irregularidades meteorológicas. Es por esta razón, que el nivel de precipitaciones registradas el domingo 31 de julio, que alcanzaron los 40 milímetros, resultaron “sorprendentes”. Esto, sumado a que no todas las zonas tienen un suelo con capacidad de absorción, es lo que provocó inundaciones en los sectores Calderón, Pomasqui y Llano Grande.  

Enfatizó además que “es muy normal ver este cambio en la climatología” pese a que el Ecuador no es muy propenso a presentar efectos tan extremos, pero, sin duda, los aluviones o las inundaciones registradas suponen “eventos a una escala más pequeña”. Pese a estas condiciones, Macas aseguró que, este tipo de sucesos climáticos continuarán sucediendo durante la primera semana de agosto con “una menor intensidad”. Incluso, para este domingo 7 se espera que haya altos niveles de radiación entre las 10h00 y 12h00.  

 

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