Pablo Dávila, coordinador del Comité para la Institucionalización Democrática, indicó que la decisión del Pleno de la Asamblea Nacional para no aprobar el proyecto de reformas a la Constitución revela que los legisladores “no tienen claro el rol, los valores y principios que deben guiar el trabajo en el servicio público”.

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En NotiMundo Estelar, Pablo Dávila, coordinador del Comité para la Institucionalización Democrática, dijo que el Pleno del Legislativo “no revisó a profundidad y no promovió el debate al que estaban obligados” sobre el proyecto de tres reformas a la Constitución – las cuales eran: la eliminación del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social; la aplicación del sistema de bicameralidad en la Asamblea Nacional, y la autonomía de la Fiscalía General del Estado. – Completó que los planteamientos surgen en representación de “muchos ecuatorianos” y resaltó que en ese sentido se debió determinar un tiempo “profundo y mesurado” para el tratamiento.

Aseguró, además, que la decisión del Legislativo es “frustrante” porque Ecuador tiene una carta constitucional, creada en Montecristi, “que fue vendida como el mejor instrumento para promover la democracia participativa”, pero más tarde las acciones de los asambleístas demuestran que “las propuestas que vienen de grupos ciudadanos que creen firmemente en el correísmo sí tienen un nivel de reconocimiento”; mientras que si son de personas que no comparten “jamás” esa ideología “entonces ahí si no hay derecho porque impondrán todas las trabas”.