180.000 aves que se encuentran en el foco donde se detectó el caso de influenza aviar, en Cotopaxi, serán sacrificadas como medida de prevención para evitar la expansión del virus. En Notimundo a la Carta, Patricio Almeida, director ejecutivo de Agrocalidad, explicó que la declaratoria de emergencia en el sector avícola, que regirá por 90 días, pretende la movilización de recursos para contener la enfermedad.

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En Notimundo a la Carta, Patricio Almeida, director ejecutivo de la Agencia de Regulación y Control Fito y Zoosanitario (Agrocalidad), explicó que el virus de la influenza aviar afecta únicamente a las aves y que consumir su carne no representa un riesgo para la salud humana.

Respecto del estado de emergencia zoosanitaria declarada a nivel nacional, dijo que la enfermedad se ha dado en varios países de la región, debido a que el virus se lo ha encontrado en aves migratorias silvestres, lo que ha hecho que se reporten brotes de la influenza en países como Canadá, Estados Unidos, México, Colombia y también en Perú. «Ese flujo migratorio que viene desde el norte ha traido este problema para nuestras aves de producción», señaló.

La alerta conlleva incrementar la vigilancia sanitaria, que representa la incorporación de más técnicos para que se desplacen a las granjas avícolas y hagan un monitoreo minucioso y se garantice el estatus sanitario.

Asimismo, se aplicó el plan nacional de contingencia, para activar los protocolos y cercos epidemiológicos, que consisten en poner en cuarentena a la granja hasta tener resultados que confirmen o descarten el virus.

Almeida precisó que estos cercos cubren 1 km de radio, en donde se encontraron otras cuatro granjas, donde se tomaron las muestras y que dieron resultado negativo. «En esta primera etapa, logramos contener el virus, aplicando las medidas de contención», sostuvo el funcionario.

Explicó que la finca donde se encontró el caso positivo debe cumplir un proceso de desinfección, y 180 mil aves serán sacrificadas, según confirmó el ministro de Agricultura, Bernardo Manzano, previamente.

Almeida aclaró que hay casos aislados de humanos que se contagian de la enfermedad, pero que responden a un consumo indebido de ciertos productos de origen aviar. «No se recomienda consumir productos crudos», recordó e hizo un llamado para tener buenas prácticas alimenticias, con una adecuada forma de preparación.

Añadió que Agrocalidad cuenta con 850 técnicos a nivel nacional para hacer la vigilancia, monitoreo y muestreo en otras granjas avícolas con el objetivo de descartar la presencia de influenza en otras provincias.

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