El presidente de la República, Guillermo Lasso, ratificó que el Ejecutivo convocará a una consulta popular en caso de obtener negativas en la Asamblea Nacional. En NotiMundo, el abogado constitucionalista, André Benavides, indicó que esta sería una “válvula de escape” que el Gobierno podría emplear para implementar la política económica de su plan político. Explicó que se puede hacer de manera indeterminada, pero recordó que el “filtro” que podría emitir una negativa es la Corte Constitucional.

Guillermo Lasso
Créditos: Secretaría de Comunicación

El presidente de la República, Guillermo Lasso, ratificó, en el día 100 de su mandato, el pronunciamiento de la ministra de Gobierno, Alexandra Vela, sobre convocar a una consulta popular si no existen acuerdos legislativos para el trámite de leyes enviadas por el Ejecutivo. Puntualmente, el Jefe de Estado indicó que “si no hay una respuesta positiva para la mayoría del pueblo ecuatoriano, el camino es la Consulta Popular”.

Al respecto, el constitucionalista André Benavides, explicó, en NotiMundo a la Carta, la viabilidad y puntualizó que es necesario tomar en cuenta los aspectos inherentes a la reactivación económica y al Plan Nacional de Desarrollo; explicó que estos “van a necesitar” una implementación a través del órgano legislativo para derogar o reformar normas o, también, para sustituir impuestos.

Precisó, además, que las modalidades contractuales, como la propuesta laboral presentada por el Ministro de Trabajo, Patricio Donoso, a manera de una medida “complementaria” al Código de Trabajo vigente, exigen un trámite en el Pleno de la Asamblea Nacional y detalló que esto se debe a que se realizarían reformas en el cuerpo legislativo laboral. En este mismo tipo de normativas también estarían comprendidas las modificaciones a la Ley Orgánica de Servicio Público (LOSEP).

Sin embargo, manifestó que para “destrabar” la falta de consensos, por no contar con la mayoría requerida en el Parlamento, el Ejecutivo sí podría convocar a una consulta popular e informó que este un mecanismo de democracia directa que cuenta con la participación de los ciudadanos para implementar decisiones a futuro que reformarían y definirían las condiciones constitucionales del país.

Mira la entrevista aquí: