La escalada de inseguridad y violencia que se vive en Esmeraldas ha obligado a cerrar negocios y mantiene en alerta a la población. En Notimundo al Día, la alcaldesa Lucía Sosa lamentó que la “discriminación y abandono” de todos los Gobiernos de turno con la ciudad, la han llevado a la crisis que ahora enfrenta. Criticó que el comandante de la Subzona 8, William Calle, haya sido removido por denunciar las falencias que tiene la policía y la imparable amenaza del crimen organizado en la ‘provincia verde’.

Créditos: Gobernación de Esmeraldas

En Notimundo al Día, Lucía Sosa, alcaldesa de Esmeraldas, señaló que durante la primera noche del Estado de Excepción decretado por el presidente Guillermo Lasso se vivió una relativa calma en la ciudad, que ha venido evidenciando el incremento de la violencia y criminalidad. Señaló que hasta el momento no se han reportado nuevos atentados contra bienes ni personas.

Criticó al Gobierno, debido al tiempo que se tardó en tomar medidas para paliar, por ejemplo, las más de 400 muertes violentas que se han registrado en lo que va de 2022. «Decían que todo es psicológico y que aquí está todo controlado; bueno, aquí está la respuesta», dijo.

Recordó que durante el Consejo Provincial de Seguridad, presidido por el ministro del Interior, Juan Zapata, y el comandante general de Policía, Fausto Salinas, replicó la situación que había expuesto el coronel William Calle, excomandante de la Subzona 8, pero que «la única respuesta fue que lo removieron (a Quito para coordinar el proceso electoral)». Para Sosa, «al coronel Calle lo mandaron a la calle» por retratar la situación que se vive en la ciudad.

Sosa destacó que durante la Asamblea Ciudadana que se realizó el pasado 20 de octubre, se resolvió conformar un comité por la paz, con el objetivo de frenar el avance de la violencia mediante propuestas reales y estrategias que ataquen la raíz de los problemas. Asimismo, criticó la lenta acción del Gobierno para frenar la crisis que vive la ciudad, pues el 26 de enero del presente año presentó al presidente Lasso un documento donde se detallaban los problemas de delincuencia organizada y común, pero recién ahora, a partir de los últimos violentos atentados, se ha tomado la decisión de declarar el estado de excepción.

Frente al feriado que se avecina en Ecuador, por motivo del Día de los Difuntos y la Independencia de Cuenca, lamentó que los negocios esperaban con ansias los días de asueto para recibir a miles de turistas del país, pero que con la actual situación el panorama se ve complicado. Sin embargo, invitó «a quienes quieran visitar la ciudad» a que acudan con las medidas de precaución respectivas, y que desde la Alcaldía se emplearán los dispositivos de seguridad para garantizar la integridad de los visitantes.

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